[hn_title heading=»2″]Auditoría energética como OBLIGACIÓN para las grandes empresas[/hn_title]
En diciembre de 2015 expiró el primer plazo para que las «grandes empresas» y las empresas con gran consumo energético(Energivores) realizaran los diagnósticos energéticos exigidos obligatoriamente por el Decreto Legislativo 102/2014, que transponía la Directiva 2012/27/UE sobre eficiencia energética.
Muchas empresas aceptaron esta imposición a su pesar, considerándola un deber burocrático que debían cumplir confiando en los operadores que ofrecían el servicio al menor coste.
[hn_title heading=»2″]Pero, ¿y si el diagnóstico energético fuera una OPORTUNIDAD?[/hn_title]
Un diagnóstico energético bien hecho da a la empresa más CONCIENCIA sobre dónde, cómo y por qué consume.
Es posible aplicar las intervenciones de gestión o diseño identificadas:
- obtener beneficios económicos (ahorro de facturas);
- mejorar las condiciones de trabajo de los operarios;
- optimizar la gestión de los recursos disponibles y el mantenimiento de las instalaciones;
- obtener beneficios productivos y medioambientales;
- descubrir nuevas tecnologías.
EN LUGAR DE UN COSTE, SE CONVIERTE EN UNA OPORTUNIDAD DE CRECIMIENTO».
A continuación en lugar de un coste, el diagnóstico se convierte en una oportunidad de crecimientoidentificar los residuos y aumentar su competitividad.
[hn_title heading=»2″]Mejore su RENDIMIENTO[/hn_title]
Otro aspecto interesante es el de los indicadores energéticos: relacionando cantidades complejas (por ejemplo, consumo y producción), se pueden identificar índices capaces de comparar la eficiencia de una empresa con el mercado o de las distintas máquinas instaladas.
El diagnóstico, la evaluación de las soluciones de eficiencia y los indicadores serán tanto más eficaces cuanto más se basen en datos fiables: la instalación de un sistema de supervisión al mismo tiempo que el diagnóstico o después de éste permite a la empresa definir y supervisar el rendimiento energético a lo largo del tiempo.
El seguimiento en otros países europeos muestra que las organizaciones con un sistema de gestión de la energía superan sistemáticamente en varios puntos porcentuales a las que no lo tienen.
[hn_title heading=»2″]Confiar en la experiencia[/hn_title]
El diagnóstico requiere operarios formados, de los que disponemos:
- COMPETENCIAS TÉCNICAS Y TEÓRICAS TRANSVERSALES
- EXPERIENCIA Y CASOS REALES DE ÉXITO
- CAPACIDAD PARA RELACIONARSE EFICAZMENTE CON LA DIRECCIÓN DE LA EMPRESA
Un buen consultor es capaz de captar, con la ayuda de los técnicos de la empresa, la esencia de los procesos analizados y proponer soluciones eficaces.